A propósito del post sobre
la nueva línea de moda Violeta by Mango,
en el que mencionábamos el estudio antropométrico realizado por el Ministerio de Sanidad
(ahora de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad) en 2008 con el objetivo de unificar las
tallas de moda femenina, hemos considerado oportuno hacer un análisis sobre el
desbarajuste del tallaje en España.
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| Los morfotipos conocidos como pera, reloj de arena y rectángulo; ahora rebautizados como campana, diábolo y cilindro / Fuente: egogloss |
Seis años después del citado
estudio, y pasado ya el plazo de cinco años que el Ministerio y las principales
firmas de moda del país se dieron para aplicar un criterio único de talla en
sus prendas, el problema sigue siendo el mismo: una mujer puede tener hasta tres tallas diferentes dependiendo de dónde compre la ropa y cuatro de cada diez tiene problemas para encontrar la talla adecuada.
Un dilema que, presumimos, se ha
ido acentuando en estos últimos seis años en los que las tendencias de la
pasarela, y por lo tanto las marcas de moda, han generalizado los patrones fit, slim, super slim, skinny y super skinny
en los percheros de sus establecimientos; tensando aún más la cuerda de la
problemática del tallaje.
Ya en 2009, en línea con el informe de Sanidad, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU)
hizo público un estudio que revelaba una diferencia de hasta 10 centímetros en una misma talla dependiendo de la marca. Cinco años después de aquel
análisis, en almagra32 hemos hecho
nuestra propia comparativa para confirmar que el desorden de las tallas sigue
vigente.
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| Fuente: thequiltedcastle |
Para ello hemos tomado como
referencia la guía de tallas de Mango, Zara, Asos, La Redoute, Taillissime by LaRedoute, H&M, Bershka, El Corte Inglés, Springfield y
Cortefiel; y hemos comparado las
medidas de la talla 42 para pantalón. El patrón de la cintura varía entre los
74 y los 81 centímetros (una diferencia de 7 centímetros); y en la cadera la
pinza está entre los 100 y los 108 centímetros (8 centímetros de diferencia).
Las firmas más "generosas" en las medidas son Cortefiel (79-81 cm en
cintura; 105-107 en cadera) y Taillissime by La Redoute (76-80 cintura; 100-108
cadera); mientras que las más "restrictivas" son Bershka, que
considera la 40 como XL y marca el contorno de cadera de la 42 en 104
centímetros; y La Redoute, con 74-78 centímetros para la cintura y 100-104 para
la cadera.
Diábolo, Campana y Cilindro
Acabar con estas diferencias era el
objetivo perseguido por el estudio antropométrico realizado por el Ministerio
de Sanidad en 2008. La medida, no obstante, llegaba con retraso. En 1999 una
ponencia en el Senado ya recomendó realizar un estudio para unificar y
actualizar el sistema de tallaje español, porque la última referencia,
fijada en 1972, se consideraba obsoleta.
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Fuente: lapasarelablanca |
La propuesta quedó olvidada hasta 2006, cuando saltó la polémica en la pasarela Cibeles (MBFWM) por la presencia de modelos extremadamente delgadas. Los organizadores de la Semana de la Moda madrileña respondieron a las críticas fijando
un nuevo criterio en los castings de maniquíes, según el cual sólo podrían
desfilar modelos con una índice de masa corporal
saludable. En la edición de septiembre de 2006, el 30 por ciento de las modelos fueron rechazadas por su extrema delgadez.
Esta llamada de atención volvió a
dirigir el foco hacia el problema del tallaje en España y los responsables políticos desempolvaron la propuesta
presentada ante el Senado una década atrás y anunciaron la realización del
estudio antropométrico.
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| Fuente: theberry |
En total, 10.415 mujeres de entre
12 y 70 años participaron voluntariamente en la
investigación. De los resultados obtenidos se dibujaron tres morfotipos
basados en el perímetro de busto, cintura, cadera y en la estatura: diábolo
(pecho y cadera asimétricos, cintura estrecha), campana (pecho y cintura
asimétricos, mayor perímetro de cadera) y cilindro (simetría de pecho, cintura
y cadera). Partiendo de las conclusiones del estudio, que también advertía de
que cuatro de cada diez mujeres tenían problemas a la hora de encontrar su
talla, el Ministerio de Sanidad propuso unificar el sistema de tallas con un
cambio en el patronaje y etiquetado que tuviera en cuenta los cuatro valores de
estatura, pecho, cintura y cadera.
Las marcas respondieron a
la iniciativa del Ministerio. El Corte Inglés, Inditex, Mango, la Asociación de
Creadores de Moda de España, Carrefour, la Asociación de Patronistas Gallegos y
el Instituto de Innovación Textil de Andalucía acordaron crear un tallaje
acorde a las medidas determinadas por el estudio, con un plazo de cinco años
para realizar la conversión[1].
Además, Sanidad llegó a un acuerdo con las firmas textiles para que los
maniquíes de los escaparates tuvieran al menos una talla 38 y que la talla 46
no se considerara una "talla especial".
Sin embargo, las promesas y los
compromisos pronto quedaron en nada, al igual que la intención de hacer un estudio antropométrico masculino,
ahora en manos de la iniciativa público-privada[2].
Tres años después del informe, en 2011, y tras gastar 1,8 millones de euros, el
Ministerio de Sanidad incluso llegó a afirmar que "nunca hubo intención de
unificar el tallaje"[3].
mrg
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